
Cuando montamos en moto por la montaña, lógicamente buscamos disfrutar al máximo, tanto si realizamos una excursión a ritmo tranquilo, como si salimos en un plan más cañero en busca de pistas rápidas, saltos o por senderos rotos, técnicos y trialeras de consideración, incluso los que buscan ir al límite y se animan a participar en algunas carreras.
Sean cuales sean nuestras pretensiones a la hora de pilotar, debemos tener muy en cuenta una cuestión, si realmente queremos disfrutar de la moto sacándole el máximo provecho, necesitamos una óptima seguridad y comodidad, sentir que la suspensión nos ayuda a superar los obstáculos, aumentando la tracción, aprovechando las buenas prestaciones de nuestras suspensiones, resultando imprescindible realizar una buena puesta a punto de la amortiguación.